Supervivientes de carne y hueso...

Un cambio en la vida…

Estas son las palabras a las que se aferran nuestros protagonistas de hoy, con quienes también tendremos la suerte de contar mañana en Voces en Marcha. Y han de aferrarse a ellas porque su esfuerzo, su lucha, las constantes barreras y trabas que les ponen, su insistencia en vencer obstáculos, la constancia, la infinita paciencia que les caracteriza, hacen que día a día crezca su ilusión en ese deporte que les da vida.

Sin pelos en la lengua, Carlos Antón, Jorge Peleteiro y Daniel Palau, jugadores del Rayo Ibense y de la Selección Española Paralímpica de Fútbol, nos cuentan lo que supone ser deportista de élite en este país, así como las limitaciones con las que se encuentran dentro de nuestra propia Comunidad.

Personas críticas, valientes, entregadas, con una claridad de ideas asombrosa, rotundas,GRANDES DEPORTISTAS.

Posiblemente sus nombres no os suenen tanto como otros, quizá sea porque sus rostros no salen en televisión cada día. Marcan goles, fallan penaltis, hacen grandes paradas, reciben amonestaciones, celebran sus victorias, como todos…

¿La diferencia?  Lejos de ganar cantidades desorbitadas de dinero, pagan para poder asistir y participar en cada competición. Buscar el medio para desplazarse al lugar en el que tendrá lugar el evento, alojamiento no demasiado lejos de las instalaciones deportivas, un lugar en el que comer cada día que dure el campeonato y, lo más complicado, encontrar futbolistas que tengan económicamente la posibilidad de costearse dichos gastos, porque desde la Federación no lo hacen, se convierte en toda una odisea ante cada competición.

Escucharles consigue dejar helado a cualquiera, pues no podemos olvidar que hablamos de profesionales que participan en un deporte a nivel internacional y que han de costearse absolutamente todo para poder hacerlo, porque también a ellos nuestro Gobierno les niega los apoyos. La Federación Española de Fútbol les cierra las puertas, les da la espalda alegando que “no interesa”, cuando realmente el coste sería insignificante.

Disculpen una vez más mis gobernantes, pero creo que olvidan que hablamos de un cambio fundamental en las vidas de estas personas, la rehabilitación por medio del deporte es un avance único.

Vergüenza debería darles hablar de “La Roja” como algo tan grande, siendo esta Selección de la que venimos hablando una de las únicas cuatro Selecciones Internacionales que no están profesionalizadas, que no reciben ayuda de sus Gobiernos.

Gracias a ese Club, al Rayo Ibense, por brindarles esta oportunidad y apostar por este equipo, siendo los primeros en tener categoría paralímpica.

Uno de ellos dice “Nos queda mucho por andar” es cierto compañero, pero… lo seguiremos haciendo juntos/as!!!!

Mañana será el gran día. Lo será por el estreno, porque por fin podremos escuchar estas tres voces y todas aquellas que se han ido sumando a esta iniciativa, esas que pretenden callar, pero que gracias a la idea de Discapacidad en Marcha y a través de Artegalia,se alzarán con fuerza.